• El Consejo Regulador de la DOP Cereza del Jerte certifica las primeras cerezas
El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte ha comenzado a certificar las primeras cerezas de la variedad Navalinda. Es la única cereza certificada en el Valle del Jerte que tiene pedúnculo.
El presidente del Consejo Regulador, Emilio Sánchez, comentó que “la campaña de momento no ha empezado bien en cuanto a producción». «Las lluvias y el granizo han estropeado una gran parte de la cereza temprana y de media temporada”, concretó.
La producción de este año ha quedado «en torno a un 10 por ciento». Por este motivo, se certificarán «30.000 o 40.000 kilos», frente a los más de 300.000 kilos que se certifican de Navalinda en años anteriores. «Lo poco que ha quedado en los árboles mejora día a día. Pensamos que la cereza puede llegar a los mercados con una alta calidad», añadió
Una vez que comienza la certificación de las navalindas, le siguen las picotas del Jerte. Estas variedades no se han visto tan afectadas por las condiciones climatológicas adversas. «Si el tiempo nos respeta en lo que queda de campaña, estimamos que el 80 por ciento de las picotas se van a salvar», afirmó Emilio Sánchez.
En relación a la situación generada por la pandemia del Covid-19 en el campo, el responsable de la DOP indicó que la gente estaba «muy preocupada» al inicio de la campaña. Sin embargo, «al final todo se está llevando con cautela y se recogerá todo lo que se pueda», explicó.
Un cultivo tradicional, sin aditivos y de sabor único
En el Valle del Jerte el cultivo de las cerezas se desempeña de una manera natural, tradicional y sin aditivos. Con ello, se consigue que las cerezas y picotas tengan un sabor único y un altísimo contenido en vitaminas, oligoelementos, flavonoides, etc. Tras una cuidadosa selección a pie de árbol, de acuerdo a un riguroso control de calidad, sólo las mejores se identifican con el sello de la Denominación de Origen Cereza del Jerte.
Existen muchos tipos diferentes de cereza, la variedad principal en la zona del Jerte es la cereza sin rabito llamada picota que llegan a partir de la primera quincena de junio y que, con la máxima calidad garantizada por la contraetiqueta que siempre les acompaña, estarán en los mercados hasta la primera semana de agosto.
La máxima calidad que garantiza la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte es muy fácil de encontrar en cualquier frutería gracias a la contraetiqueta que acompaña cada caja de cerezas y picotas procedentes del Valle del Jerte.