El Valle del Jerte es rico en piscinas naturales. El verano es una época excepcional para visitarlas porque el viajero podrá refrescarse en sus aguas y conocer de cerca la campaña de las cerezas del Jerte, que coincide con la época estival. De entre la gran variedad de piscinas naturales de la comarca, las más conocidas son las que se encuentran en la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, en el paraje de Los Pilones. Son 13 piscinas naturales, conocidas como Marmitas de Gigante, que son el resultado de la erosión provocada por el agua sobre la roca granítica que las delimita. Este entorno es tan excepcional que el conocido blog El viajero astuto situó las piscinas de Los Pilones entre las 15 mejores piscinas naturales del mundo.
Pero las posibilidades del Valle del Jerte no terminan aquí, ya que existen otras piscinas naturales esparcidas por los municipios de la comarca.
En Cabezuela del Valle se encuentra la piscina natural La Pesquerona. Se trata de una piscina natural en el río Jerte, perfectamente equipada para los bañistas, con zonas de sombra y chiringuito. En el mismo municipio se están las piscinas naturales de El Simón, La Picaza y El Vao.
En Jerte pueden encontrarse las piscinas naturales de El Nogalón o La Tenería, ubicada esta en la unión de la Garganta de los Papuos con el río Jerte. En Navaconcejo, se encuentran las piscinas naturales de El Pilar y El Cristo, mientras que, en Rebollar, se puede disfrutar del baño a lo largo del río en charcos.
También en El Torno existe otro charco en el río Jerte conocido como La alameda del Pino, mientras que en Casas del Castañar existe otro conocido como El Benidorm. En Cabrero, se encuentra la piscina natural de la Garganta del Rabanillo, con una piscina para adultos y otra para niños. Y, por último, en Valdastillas existe otra piscina natural en la Garganta de Bonal.
Además, existen varias piscinas municipales en los distintos pueblos del Valle del Jerte. Podéis encontrar más información sobre los accesos en las webs de la Asociación de Turismo del Valle del Jerte o en la de Extremaduarte, donde dedican un espacio a este tema.