El Valle del Jerte, un lugar para amantes de las aves

ValledelJerte_paseando2Los amantes de las aves también tienen en el Valle del Jerte un destino obligado. La práctica del Birding o Birdwaching está creciendo en la comarca, debido a a que sus numerosos ecosistemas favorecen el asentamiento o tránsito de distintos tipos de aves.

La primavera, con el robledal cubierto de hojas, es una época óptima para ver aves rapaces o escuchar el canto de la oropéndula y el ruiseñor. También es un buen momento para buscar en los robledales más altos algún ejemplar de Papamoscas Cerrojillo, muy escaso; mosquiteros comunes o algún Mosquitero Papialbo.

En verano, los amantes de los pájaros podrán contemplar aves rapaces como el Abejero, el Gavilán o el Azor, así como aves más propias de las inmediaciones de zonas con agua, como el Mirlo Acuático y la Lavandera Cascadeña.  Más raramente es posible avistar alguna Cigüeña Negra o Nutria. También aves cuyo canto puede apreciarse de noche como el Autillo, Mochuelo y Chotacabras y otras que buscan temperaturas más frescas en la montaña, como el Cernícalo Primilla, el Águila Culebrera o los buitres Leonado, Negro y Almoche.

En otoño, finalizada la cría, las aves migratorias se dirigen hacia el sur, por lo que es buena época para contemplar papamoscas, colirrojos, currucas y mosquitaros. Es más habitual la Cigüeña Negra y, excepcional, el Águila Pescadora. En las zonas altas, pueden encontrarse Collalba Gris, Tarabilla Norteña y Aguilucho Cenizo. También Grulla, Paloma Torcaz o zorzales.

Por último, en invierno, cuando muchas aves huyen de las bajas temperaturas, es posible observar Águila Real, Halcón Peregrino, Escribano Montesino, Totovia y Curruca Rabilarga. En los escasos pinares también es posible observar Reyuelo Sencillo y, en menos ocasiones, Piquituerto.
En los robledales, hay menos aves en esta época del año, pese a que permanecen carboneros, trepadores, pájaros carpinteros y Arrendajo. En los huertos de cerezos y olivo, se verán currucas, zarzales, pinzones, Verdecillo o Escribano Soteño.

Algunos lugares destacados para la observación de aves son la Cola del Embalse del Jerte, el Puerto de San Gamello, el Puerto de Piornal, el Puerto de Honduras, la Garganta de los Infiernos, la Garganta de San Martín o el Puerto de Tornavacas. Podéis consultar más información en la web de la Asociación de Turismo del Valle del Jerte. También en Birding Extremadura, donde os proponen rutas para contemplar todas estas aves.