También conocido como el Valle del agua, el Valle del Jerte es famoso por sus gargantas, cascadas y piscinas naturales. En esta entrada os proponemos un recorrido por seis de las cascadas del Valle del Jerte más importantes.
La Cascada del Caozo
Se encuentra en un lugar muy frecuentado y accesible y tiene 30 metros de altura. El agua se precipita sobre una pared de granito, pulido por la presión del agua y el paso de tiempo. En la carretera que une Valdastillas y Piornal. Un cruce bien indicado señala el camino hasta este espectacular enclave natural. También se puede acceder haciendo una ruta de senderismo.
La Cascada del Calderón
Próxima a la Cascada del Caozo, se encuentra la del Calderón. Es otra de las cascadas más famosas del Valle del Jerte. En ese caso, se trata de una gran losa pulida por la que el agua se precipita otros 30 metros, terminando en una pequeña poza. Se puede llegar caminando desde Piornal por el Camino Real, un trecho con mucha historia. También desde la carretera CC 17.5, entre los kilómetros 9 y 10, tomando un desvío en una curva cerrada, que, a poca distancia, permite observar este salto de agua, seco en época de sequía.
La Cascada de la Garganta de las Nogaleas
La garganta de las Nogaleas concentra en poco menos de un kilómetro varios saltos de agua. El entorno que destaca por su vegetación, compuesta por robles, rebollos, castaños, fresnos, alisos y almeces. El camino a la Cascada de la garganta de las Nogaleas se encuentra bien señalizado. En Navaconcejo, desde la carretera nacional, hay que cruzar el Puente Viejo y tomar hacia la derecha la avenida Virgen del Pilar, junto al río Jerte. Tras pasar junto al parque, se cruza un puente sobre la propia garganta de las Nogaleas y, entre paneles de interpretación del sendero SL-CC 33 y del Descenso de Barranco, hay que girar a la izquierda, siguiendo las marcas del sendero, blancas y verdes. Tras varias cascadas, aparece la más conocida de esta garganta. Una vez en la carretera asfaltada de IRYDA, se puede continuar ascendiendo entre pasarelas de hierro hasta las últimas cascadas o regresar en descenso entre campos de cerezos.
La Cascada de la Desesperá
Otra de las cascadas del Valle del Jerte, la de la Desesperá. Se encuentra en la carretera de Piornal a Pasarón de la Vera. Esta cascada se queda sin agua en verano, pero en invierno es una de las más hermosas de la zona.
La Cascada Manto de la Virgen
Esta espectacular cascada, también llamada el Chorrero de la Virgen, se observa en todo su esplendor desde el mirador situado en la Reserva Natural, camino del puente de los Pilones. Se puede llegar al mirador por distintos senderos como el Ciane, PR-CC 15.
Las mejores épocas para visitarla son el otoño, el invierno y la primavera. En verano se queda con poca agua. Sin embargo, en las estaciones lluviosas, un importante caudal de agua cae sobre las rocas graníticas del Risco Encinoso. Recibe este nombre por la llamativa presencia de encinas, que se agarran a las rocas y parecen jugar con la gravedad.
La Cascada de Marta
En la Cascada de Marta, el visitante se encontrará con una zona de aparcamiento y merendero. Es un enclave ideal para disfrutar de la cascada y hacer un alto en la ruta que esté llevando a cabo. Se encuentra en Valdastillas.