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La recolección de las cerezas del Jerte: un proceso manual de larga tradición

Falta menos para que arranque la temporada de cerezas del Jerte. Durante los meses de mayo y junio, incluso julio, las familias de agricultores del Valle del Jerte se afanan en las tareas de recolección de las cerezas y picotas del Jerte. Pero como una imagen vale más que mil palabras, en esta entrada os mostramos a través de reportajes televisivos de anteriores campañas, realizados en el Valle del Jerte por Antena 3 y Canal Extremadura, cómo se llevan a cabo las tareas de recolección de estas famosas cerezas:

 

Comenzando en las zonas más cálidas del Valle

La recolección de la cereza se realiza de modo manual. En el proceso colaboran todos los miembros de las familias productoras de cereza, que provistos con las tradicionales cestas de madera de castaño van recogiendo el producto comenzando por los cerezos de las zonas más cálidas del Valle y terminando por los de las zonas más frías, las últimas en florecer y producir.

 

Selección y clasificación en el campo

A continuación, se seleccionan y clasifican las cerezas, según su calibre (tamaño). Este proceso de selección normalmente lo realizan las mujeres de cada familia de productores. Quitan las hojas que se han colado en el ceso, las cerezas picadas por los pájaros o rajadas y las que no son óptimas para el consumo por su estética.

El siguiente paso es llevar el producto a las cooperativas, donde de nuevo se verifican el calibre y calidades de las cerezas, y se realiza el proceso de enfriado, para que la cereza del Jerte llega a los mercados más alejados, en las mejores condiciones. En 2014, el 60% de la producción de cerezas del Jerte salió fuera de Extremadura, destacando mercados como el inglés.